miércoles, 26 de agosto de 2009

LA SOLEDAD

Sumergida en la más amplia, sencilla, emotiva, justificada, carismática, tranquila, anhelada, vivida, enriquecida y saludable soledad.

Llena de la más apacible, indescriptible, sumisa, hermana, amiga, amada soledad. Embobada en la más hermosa, inteligente, apaciguada, superior, admirada soledad.

No hay manera, no existen palabras para definir a la cosa más extraña pero más placentera que se me ha ocurrido liberar. Es ella, tan única, tan presente ahora, tan esperada soledad.

No te engaña, no te tima, no te encierra, no te exige, ella es así de simple, así de comprensiva, no te grita, no te pega, no lastima.

Ella es superior en todo aspecto, es difícilmente comprendida, pero cuando la llegas a conocer con locura, terminas enredada en su dulzura.

No hay miel incluso en todo el mundo, que se puede comparar con tal dulzura, cuando logras probarla, no logras parar jamás a su sabor.

Pero es cruel con quien no entienda el significado de su creación, es que aquel que no comprenda tan dichosa invención, morirá desangrado en las garras del león, perderá sus pieles ante las hienas hambrientas de su olor. Perecerá ante el oso más depravado y será devorado por el lobo más feroz.

No encontrará jamás refugio, ni compañía adecuada o al menos equilibrada dentro de la soledad bendita, mi soledad enamorada.

Daniela H Camarán

@DanielaCamarán

No hay comentarios:

Publicar un comentario